CONQUISTAR LA CUMBRE

Edurne Pasaban nuestra Guipuzcoana internacional conquistadora de desafíos. A los 16 años ascendió al Mont Blanc (4.810 m.), desde entonces la montaña forma parte de su vida y desde 2010.  Edurne es parte de la historia del alpinismo como la primera mujer en el mundo en coronar los 14 ochomiles.

La vida de Edurne va más allá de sus hazañas en las montañas, es una historia de superación personal y profesional… de valentía, motivación e inconformismo. A o que se añade su sentido de servicio y ayuda a los demás. Por eso creó la Fundación Montañeros para el Himalaya Edurne Pasaban (MHF) desde donde se financian proyectos de educación para niños y niñas del Himalaya.

¿Edurne que ha supuesto para ti coronar las 14 montañas más altas del planeta?

Estos desafíos me han enseñado las claves para llevar un proyecto de éxito. Las expediciones me han formado como alpinista, como persona y como líder de equipos.

¿Cómo puedes llevar al mundo una experiencia como la tuya, con tanto sufrimiento y perseverancia?

Realizo las conferencias para empresas donde trasmito mis experiencias en entornos llenos de incertidumbre y cambios, como los que vivimos en nuestra sociedad. En ese entorno es clave el afán de superación, el inconformismo, el trabajo en equipo, la perseverancia y la pasión para cumplir con éxito nuestros objetivos.

Desde mi experiencia vital trasmito a grandes directivos y a diferentes equipos profesionales las claves para alcanzar el éxito ante cualquier reto personal y laboral. Las claves que he utilizado para liderar un equipo y conseguir el éxito de los 14 ochomiles del planeta.

¿Qué consideras fundamental para trabajar con equipos en momentos difíciles?

La comunicación es esencial, tener claros los objetivos, estar dispuesto a escuchar. En todos los proyectos que desarrollamos en la vida participan personas llenas de sentimientos y emociones, debemos conocer nuestras propias emociones y reconocer los estados emocionales de tu equipo.

 Identificar donde están y cuando aparecen las oportunidades y aprovecharlas lo máximo que puedas.

Los grandes proyectos suelen ser largos en el tiempo. Yo comencé mi proyecto en 2000 con el techo del mundo, el Everest y han hecho falta 10 años para conseguirlo.

La clave está en tener flexibilidad, constancia y capacidad de adaptación en los momentos críticos, que hay muchos. Buscar tu motivación para seguir y motivar al equipo para continuar comprometidos con el proyecto.

Cómo estimulan tus palabras Edurne. Muchas gracias por tu ejemplo de lucha. Desde este lugar animo a las personas a que no nos pongamos límites. Con esfuerzo y perseverancia podemos conseguir mucho más de lo que pensamos.